Actualmente son más de 3.000 empresas nacionales que deberán
adherirse a las normas de la Ley de Inclusión Laboral, y que deberán considerar
cupos en sus plantas de empleados para personas con discapacidad.
A seis meses de la promulgación de esta ley, y en el marco
de la reciente feria Expo Inclusión, donde se dispusieron 500 cupos laborales
para personas en condición de discapacidad, el ministro de Desarrollo Social
Alfredo Moreno comentó que “ya tenemos 917 empresas que representan 4.445
puestos de trabajo con personas con discapacidad. De ellas, 2.895 son hombres y
1.550 son mujeres”.
Para beneficiarse de la Ley de Inclusión Laboral el
interesado debe poseer una pensión de invalidez de cualquier régimen previsional
o tener cualquier discapacidad calificada previamente por las Comisiones de
Medicina Preventiva e Invalidez (COMPIN), dependientes del Ministerio de Salud.
De acuerdo a la normativa, las empresas que cuenten con más
de 100 puestos de trabajo deberán destinar al menos el 1% de ellos para
candidatos con algún tipo de discapacidad. Además, se establece que las
personas en estas condiciones no pueden percibir salarios menores al sueldo
mínimo, y se fija en 26 años la edad límite para formalizar contratos de
aprendizaje con personas que posean discapacidad intelectual.
El ministro Moreno comentó que “las empresas y los
empleadores están entrando paulatinamente a esta ley, cambiando las condiciones
de trabajo y la forma en que se contrata a las personas”.